La tecnología OBD en GPS se ha convertido en aliada del sector automotriz y actualmente es utilizada por la telemática.
El estándar OBD (“On Board Diagnostics”o Diagnóstico a bordo), empezó a implementarse en 1988.
A partir de esa fecha se encuentra disponible básicamente en todos los vehículos, ya que por norma, los fabricantes deben incluir ese puerto de diagnósticos.
Si bien la finalidad inicial del puerto OBD era controlar el máximo de emisiones de gas, con el tiempo, su funcionalidad se fue ampliando.
Actualmente se utiliza para obtener el control y monitoreo completo del motor y otras partes del vehículo.
A diferencia de la primera generación de OBD, la segunda conocida como OBD-II, permite recibir una alerta cuando el vehículo tiene un índice de emisiones de gas mayor a 1.5. Además, detecta fallas electrónicas, químicas y mecánicas.
La solución que ofrece esta tecnología es que permite leer variables y a través de esas lecturas se pueden detectar fallas en el vehículo y corregirlas puntualmente. Lo cual facilita el mantenimiento de los vehículos y extiende su vida útil.
¿Cómo funciona la tecnología OBD en GPS?
El objetivo de la tecnología OBD, es prevenir un mal uso o el deterioro de componentes por falta de mantenimiento del vehículo.
Al conectar un GPS a un puerto de diagnósticos OBD, se puede recibir información sobre el estado del vehículo en tiempo real. Por ejemplo: su velocidad, kilometraje, nivel de combustible, uso de cinturones de seguridad, datos de tacómetro, entre otros.
Adicionalmente el OBD-II permite conocer las RPM, niveles de aceite, temperatura, entre otras variables.
En la actualidad existen dispositivos GPS diseñados para conexión directa con el puerto OBD-II. Siendo un complemento ideal a la tecnología GPS, ya que permite evaluar los hábitos de conducción, RPM, temperatura, etc., pero de forma remota.
Esta información le permite al analizador de la Flota, conocer en tiempo real los datos precisos de sus activos. Además, le ayuda a tomar decisiones y acciones preventivas en el momento oportuno, para evitar gastos innecesarios.
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¿Qué información brinda?
Aunque puede variar según la marca y el modelo de GPS, en la mayoría es posible conocer los siguientes parámetros, a través del uso de la tecnología OBD en GPS.
- Nivel de combustible
- RPM
- Temperatura de motor
- Velocidad actual
- Índice de emisiones
- Códigos de falla
- Número de Identificación del Vehículo (VIN=)
- Contador de encendidos
- Odómetro actual
- Uso de los cinturones de seguridad
Es importante mencionar que en algunos países, las compañías de seguros han optado por utilizar dispositivos GPS OBD-II para conocer la idoneidad de las personas que solicitan seguros de auto.
Para ello colocan el dispositivo en el vehículo durante algunos días y a través de la tecnología OBD en GPS, logran diagnosticar la conducta de manejo del solicitante.
Finalmente con dicha información, generan un índice de qué tan propensa estaría esa persona a sufrir un percance.
Cabe resaltar que los dispositivos con OBD-II son la mejor opción para optimizar el uso de la flota y obtener los mejores resultados.
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